
Confieso que la probabilidad de verme en full Christmas spirit no es muy alta, especialmente, en esta primera Navidad sin él. Sobran varios dedos de una sola mano contando las veces que en mi vida he usado un gorrito de Santa y sobran más contando cuántas veces he puesto algún tipo de música navideña, pero eso no le resta magia a la temporada. Doy gracias al Creador por la bendición de estar cerca de mi familia para celebrarla y me regocijo en amanecer este día en casa de mi madre, recargada con su amor y con todos los embelecos de comida, envoltura de regalos y casa llena de niños que ello representa.
En agradecimiento a cada “me reí”, “lloré” y “me identifiqué” que he recibido de ti, lector, hoy quiero regalarte esta lista de deseos que, por más cursi que parezcan, son -para mí- lo mejor de la festividad. Ojalá que esta Navidad no te falte:
- Alguien a quien envolver con tus brazos
- Comida caliente sobre tu mesa
- La ilusión de este día reflejada en algún par de ojos (pueden ser los tuyos)
- El privilegio de dar (lo que sea, pero bienintencionado)
- Una canción para cantar, bailar o tararear (aunque nadie te vea)
- La risa de algún niño
- Un sueño en el que creer
- La esperanza de un mejor mañana (trillado, pero necesario)
- Resiliencia
- Salud para gozar de todas las anteriores
¡Ah! Y, si me permites pedirte un favor, dedícale más tiempo a tu gente que al celular porque, después de todo, los verdaderos recuerdos se guardan mejor en la mente que en las fotos. Colecciona momentos, lector, abraza a los tuyos, nutre tu alma… y gracias, ¡GRACIAS!, por estar ahí para poder compartir contigo en #500PalabrasOMenos.
¡FELICIDADes siempre! 🎁